domingo, 24 de octubre de 2010

LA TRAGEDIA GRIEGA





EURÍPIDES

1. INTRODUCCIÓN
Eurípides es un dramaturgo griego, el tercero junto con Esquilo y Sófocles de los tres grandes poetas trágicos de Ática. Su obra, enormemente popular en su época ejerció una influencia notable en el teatro romano. Posteriormente su influencia se advierte en el teatro del renacimiento como en los dramaturgos franceses Pierre Corneille y Jean Baptiste Racine.



2. ORÍGENES DE LA TRAGEDIA GRIEGA :



En el año 334 a.C. Aristóteles defendió que la tragedia (mediante una serie de circunstancias que suscitan piedad o terror) es capaz de lograr que el alma se eleve y se purifique de sus pasiones.
Este proceso, que se denomina "catarsis", es la purificación interior que logra el espectador a la vista de las miserias humanas. El fondo común de lo trágico será la lucha contra un destino inexorable, que determina la vida de los mortales; y el conflicto que se abre entre el hombre, el poder, las pasiones y los dioses.
Los griegos fueron los creadores de la tragedia. En un principio, le confirieron un profundo sentido religioso, ya que la obra trágica nació como representación del sacrificio de Dionisios (Baco) y formaba parte del culto público.
Los teatros debían edificarse en las inmediaciones del templo del dios. Los actores y cantores eran considerados por los sacerdotes, personajes inviolables y sagrados.

BIOGRAFIA DE EURIPIDES

Eurípides nació en el año 480 a.C. en Salamina. Fue hijo de un comerciante acomodado y de una mujer noble, aunque muchos comediógrafos, al burlarse de él, pregonaran que su madre fue verdulera. Poco se sabe de él, pasó la mayor parte de su vida escribiendo teatro, lejos de todo cargo político. Fue contemporáneo de Sófocles, y muy niño como para conocer a Esquilo. Murió en 406 a.C. en la corte de Arquelao en Pela de Macedonia. Sófocles honró su muerte dirigiendo vestido de luto los coros de Atenas.



4. UNA NUEVA CONCIENCIA

A diferencia de Esquilo y Sófocles, Eurípides representaba los nuevos movimientos morales, sociales y políticos surgidos en Atenas hacia finales del siglo V a.C. Fue éste un periodo enormemente fructífero en el plano intelectual, durante el cual el conocimiento era considerado como el mayor de los logros terrenales. Anaxágoras acababa de demostrar que el aire era un elemento y que el Sol no era una divinidad, sino pura materia. Se establecían nuevas verdades en todos los campos del saber y Eurípides, sumamente receptivo a todas ellas, introdujo una nueva conciencia en la tragedia. Se interesó ante todo por el pensamiento y las experiencias del ser humano ordinario, más que por las figuras legendarias del pasado heroico.
Si bien bebió en las fuentes de la mitología antigua, Eurípides trataba a sus personajes de un modo realista: ya no eran símbolos idealizados y ajenos a la vida normal, sino que se comportaban como sus contemporáneos atenienses. Eurípides compartió el escepticismo (desconfianza)intelectual de su época y arremetió en sus obras contra los dogmas morales y religiosos del pasado, que aún gozaban de cierto crédito entre el pueblo llano. Su actitud y su estado de ánimo se movían entre ambos extremos, a veces incluso dentro de una misma obra. Era capaz de demostrar la corrupción y la debilidad humana con amargura y hondo realismo, y al mismo tiempo de reflejar en sus obras un profundo respeto por el heroísmo humano, la dignidad y la pasión. Eurípides asignó un lugar destacado en su obra a los personajes femeninos y el protagonista de sus dramas era con frecuencia una heroína del crimen o la virtud.




5. OBRAS
ESTRUCTURA DRAMÁTICA :

La estructura de las obras de Eurípides se ha tachado a menudo de imperfecta por el uso del coro como un elemento independiente de la acción, y por el hecho de que sus obras se basan con ‘desarrolla sin obstáculos hasta alcanzar su clímax devastador. También se le ha criticado el uso de un prólogo explicativo en el que pone en conocimiento de los espectadores sucesos anteriores al comienzo de la obra y a menudo esboza también los acontecimientos futuros. Aristófanes lo ridiculizó por el uso mecánico y exagerado de este recurso, normalmente cargado de largas historias acerca de los personajes dramáticos. Otros de sus recursos eran el deus ex machina, o introducción inesperada de un dios para facilitar o provocar el desenlace, y la alteración de las leyendas en función de las necesidades de la trama.


Eurípides debió escribir cerca de 75 tragedias, de algunas de ellas tenemos noticia de sus títulos e incluso de algunos fragmentos, pero el hecho es que sólo se han conservado 18 de las que podemos clamar la autoría por parte de Eurípides.
1.Alcestis (Άλκηστις)

Apolo había dicho a Admeto que en el momento en que fuera a morir, podría impedirlo si otra persona se ofrecía a morir por él, es su esposa Alcestis esta persona. Cuando Admeto va a morir, Alcestis, triste pero dispuesta al sacrificio, se despide la sus hijos y de la vida, y muere. Admeto va entonces al Palacio de Heracles (Hércules) y le cuenta lo sucedido. Heracles comprende todo y viaja hasta el infierno para enfrentarse a Tánatos (Thánatos, la Muerte) y consigue que Alcestis sea devuelta a la vida, y a su marido, Admeto.
En esta obra debería destacarse el contraste existente entre Ademto, el rey de Tesalia, y su esposa Alcestis ya que, ella, entre heroicidad y razocinio se opone al marido siempre dubitativo como bien demuestra en las conversaciones con su padre que llega a decirle que buen remedio ha hallado para no morir si convence a la mujer para que lo haga por él. Pero de pronto aparece Heracles (Hércules) para solucionar el problema y rescatar a Alcestis después de debatir con la Muerte (Thánatos).

2.Medea (Μήδεια)
Jasón, esposo de Medea y padre de sus hijos, va a repudiarla y a casarse con la hija de Creonte, rey de Corinto. Medea, enfurecida, colérica y clamado venganza más tarde, clama ruegos y amenazas al insensible Jasón. Una vez que se da cuenta Medea de que nada puede hacer, planea y ejecuta su venganza a pesar de que Jasón ha tratado de convencerla diciéndole que lo hace por su propio bien, ya que se encuentran en tierra extraña y casarse con la hija del rey es la mejor solución pues aportará grandeza a los hijos que tienen ambos: Medea y Jasón. Pero Medea se venga, simula haber sido convencida por Jasón y envía a sus hijos con ricos regalos para la novia al palacio de Creonte. Pero esos regalos tienen un conjuro: quien los vista o toque morirá, y así sucede: mueren Creonte y su hija. Pero Medea va más allá y para engrandecer la desgracia de Jasón, mata a los hijos de éste, que son los suyos propios.
Es, seguramente, la obra maestra de Eurípides. Medea es la mujer enfurecida por el repudio del marido que trama un crimen para vengarse. Jasón, por su parte, es la figura del hombre insensible, aberrante y oportunista que, ante las recriminaciones justificadas de Medea, sólo sabe engañarla con demagogia. Es, por otra parte, la primera obra en la que una figura femenina alcanza tal grandiosidad y magnanimidad, sin embargo, la obra no gustó, y se tuvo que conformar con el tercer premio del certamen al que fue presentada.

3.Hipólito (Ιππόλυτος)

Hipólito es un joven que repudia el amor, vive dedicado a la caza, sin embargo, suscita una gran pasión en su madrastra, Fedra. Hipólito, gracias a que lo dice una criada, se entera del amor de su madrastra hacia él y se muestra insultante con ella. Fedra, rechazada, se ahorca, pero antes de morir escribirá que Hipólito ha deshonrado a su padre, Teseo, manteniendo relaciones con ella. Teseo, enfurecido, no cree las explicaciones de su hijo y lo echa de casa, entonces Hipólito cae bajo las ruedas del carro que lo llevaba y queda gravemente herido. Aparece la diosa Artemis (Diana) quien cuenta a Teseo la verdad. Llevan a Hipólito a su hogar y muere a brazos de su padre, pues hallábase profundamente herido.
Esta obra presenta el problema de la exacerbada pasión humana, que consigue magnificarse con la oposición Hipólito / Fedra: uno es casto y seguidor de Diana, la otra es fervorosa y libidinosa. También es el contraste entre el deber y el placer en que de nuevo se oponen Fedra (placer) e Hipólito (apelando a la virtud y al honor de su padre). Es el cuadro de una mujer que se venga de un amor que no le corresponde, aunque el público ateniense mejor lo viera como la pugna entre Artemis y Afrodita.

4.Hécuba ( Εκάβη)

Vencida Troya, los troyanos son prisioneros de los griegos, incluida Hécuba, la viuda del rey Príamo de Troya. Hécuba conoce la noticia de su hija va a ser sacrificada en el túmulo de Aquileo y además, le traen el cadáver de su hijo, aún niño, que ha sido asesinado. Intenta hablar con Odiseo (Ulises) y con Agamenón, pero nada consigue. Finalmente se le vaticina su futuro: que morirá convertida en la perra de Agamenón y de su hija Cassandra y que ambos morirán a manos de Clitemnestra.
Aquí Eurípides se conmociona con la situación de los vencidos en la guerra de troya, y a la vez critica la mano cruel de los vencedores. Es una tragedia sanguinaria en la que destacan las interveciones de Odiseo (Ulises) y Agamenón y los lamentos de Hécuba. Todas las desgracias futuras aumentan el infortunio de la anciana viuda de Príamo que, a pesar de tramar venganza por la muerte del hijo a manos de Polidoro, nada consigue. Todo esto es una historia plenamente humana, no aparecen los dioses.
5.Las Troyanas (Τρωιάδες)

Continúa Eurípides con la anciana Hécuba como protagonista. Esta vez se trata del triste tema de las mujeres troyanas que, una vez perdida la guerra, se ven como esclavas en manos de los griegos. Destaca un paramento de Helena justificándose cuando se reencuentra con su marido Menelao, y otro episodio en que se nos muestra un Odiseo (Ulises) cruel, que manda matar al hijo de Héctor y a Andrómaca.
No cabe duda de que la finalidad de esta tragedia es mostrar la crueldad de los vencedores en la Guerra de Troya (los griegos) y la triste suerte - la esclavitud - de los vencidos.



6.Electra (Ηλέκτρα)

Después que Clitemnestra asesine a su marido Agamenón, entrega a su hija Electra a un campesino para evitar que tenga descendencia noble que quiera vengar el crimen. Electra pues vive en en el campo, pero no mantiene relaciones con su esposo, un hombre honrado. Orestes (hermano de Electra) llega a la casa de Electra acompañado por su hermano Pílades y cuando al fin los hermanos se reconocen, planean la venganza sobre la madre y el nuevo marido de ésta: Egisto. Orestes siente remordimientos, pero su crimen es expiado.
Eurípides trata de dar lógica a un tema ya desarrollado por Esquilo y por Sófocles. Este intento de hacer lógica la tragedia se lleva a cabo mediante la no aparición de los dioses. Electra mata ella misma a su madre, Clitemnestra, en un episodio de gran fuerza y dramatismo. Pero más tarde, Orestes y Electra se dan cuenta de la magnitud de su crimen y pesa sobre ellos el sentimiento de culpa, aunque no llegan a arrepentirse. Se nos anuncia al final la expiación del crimen. Esta es una tragedia de dolor y sufrimiento y de importante conflicto moral: es justo que Clitemnestra expíe su crimen con la muerte, pero aún así, eso no explica el matricidio.

7.Orestes (Ορεστης)

Después de matar a su madre Clitemnestra, Orestes es víctima de la persecución de las erinias que persiguen a los criminales. La locura le acecha y su hermana Electra le ayuda. En Argos el ágora se ha reunido para juzgar a los dos hermanos cuando llega Menelao (hermano de Agamenón) y su esposa Helena de Troya, también llega el padre de Clitemnestra y de Helena: Tindáreo que pretende se castigue a los asesinos de su hija. El ágora ha decidido condenar a muerte a los hermano por el asesinato de la madre, pero entonces, Pílades, el gran amigo de Orestes, consigue desviar el tema para que se juzgue a Helena, la culpable de la guerra de Troya y, en consecuencia, de todas las calamidades posteriores. Orestes y Pílades asaltan el palacio de Menelao y de Helena y secuestran a su hija Hermíone, Helena logra escapar de la persecución. Más tarde, Apolo explica que Helena ha sido salvada y colocada entre las divinidades y explica que Menelao ha de interceder ante el ágora para que su sobrino Orestes no sea condenado, y que después de ir a Atenas a purificarse, ha de casarse con su prima Hermíone (la hija de Helena y Menelao), y que Electra se case con Pílades.
Sin duda alguna, la acción de esta tragedia es consecución de la anterior. en un primer momento se nos presenta a Orestes castigado por su propia conciencia pues sabe que ha cometido un crimen terrible al asesinar a su madre. Se nos muestra la culpabilidad y el remordimiento de la conciencia de forma magistral. Cuando llega la noticia de que los ciudadanos han condenado a Orestes y a Electra y parece que ya nada se puede hacer, aparece Pílades que, casi como un "deus ex machina" propone la idea de juzgar a Helena, desviando el tema sabiamente, y entonces desaparece la idea en Orestes de la culpabilidad y torna a una febril venganza sobre Helena. Cuando pretenden matar a Helena, aparece el deus ex machina Apolo para salvar la situación de forma pacífica, e incluso propone una explicación muy moderna de la guerra de Troya: fue una solución demográfica para un pueblo que ya era muy numeroso.

8.Ifigenia en Táuride (Ιφιγένεια ηεν Ταυρίδι)

Después de ser salvada por Ártemis (Diana) justo en el momento en que su padre, Agamenón, iba a sacrificarla, Ifigenia es sacerdotisa del templo de Ártemis en Táuride, lugar en el que la misma diosa la ha colocado. En las inmediaciones del palacio reina el bárbaro Toante que obliga a Ifigenia a inmolar a todo el griego que se acercara al lugar. Orestes, hermano de Ifigenia, llega entonces a la Táuride ya que un oráculo le ha dicho que la única manera de salvarse de las erinias es devolviendo la estatua de Ártemis a la Ática. La estatua se encuentra en el templo donde es sacerdotisa Ifigenia. El rey de Táuride al ver a Orestes ( que llega acompañado por su inseparable Pílades) obliga a Ifigenia a inmolarle. Los dos hermanos aún no se han reconocido como tal y en un momento dado, Orestes narra a Ifigenia todas las desgracias acaecidas en la familia. Cuando al fin los dos hermanos se han reconocido, huyen de Táuride camino a Argos con la estatua de Ártemis, y esta misma diosa será la que les proteja en su huida.
Aunque resulte un poco extraño, esta obra no plantea ningún conflicto moral o psicológico serio, en realidad es sólo una tragedia de acción y peripecias en la que gracias al ingenio y audacia de los tres (Ifigenia, Orestes y Pílades) logran escapar del rey de la Táuride.
Ifigenia es el tema perteneciente del ciclo de Micenas - Argos al que Eurípides ha dedicado tantas tragedias. A Ifigenia, la hija de Clitemnestra y de Agamenón que debiera ser sacrificada para que la guerra de Troya pudiera llevarse a cabo, Eurípides dedica dos tragedias: "Ifigenia en Táuride" e "Ifigenia en Áulide". (Jarrón representativo del mito sobre Ifigenia.)

9.Ifigenia en Áulide (Ιφιγένεια η εν Αυλίδι)

Las tropas griegas, comandadas por Agamenón, han quedado inmovilizadas en la costa de la Áulide cuando pretendían llegar a Troya. El adivino Calcante explica que tal inmovilidad se debe a que Agamenón había prometido un sacrificio a la diosa Ártemis (Diana) y las naves no podrán continuar su camino hasta que Agamenón sacrifique a su hija Ifigenia. En un primer momento Agamenón se niega, pero más tarde y después de la intervención de Menelao (el más interesado en que se lleve a cabo la campaña de Troya) que le convence, Agamenón hace llamar a su hija. Ifigenia llega acompañada de su madre Clitemnestra y de su hermano Orestes, aún niño. Ambas, la madre y la hija, llegan convencidas de que se va a anunciar el compromiso entre Ifigenia y Aquileo (Aquiles). Cuando se descubren las verdaderas intenciones de Agamenón, se produce un conflicto. Ifigenia en un primer momento se niega, pero cuando es consciente de lo inevitable de su muerte, se presta al sacrificio en un alarde de patriotismo para ayudar a su pueblo. Cuando Agamenón va a clavar su cuchillo sobre Ifigenia, la diosa Ártemis se la lleva y en su lugar coloca una cierva.
Esta tragedia, capítulo anterior a la de "Ifigenia en Táuride" es una de las mejores obras de Eurípides. Ifigenia muestra un patriotismo admirable cuando decide que sólo su muerte podrá llevar la gloria a los griegos, y se presta a ser sacrificada. Pero la figura más interesante es la de Clitemnestra. Eurípides que, durante toda su vida se había esforzado por dar una imagen de Clitemnestra sanguinaria, vil, mezquina, malvada y maquiavélica, la hace aparecer ahora como una madre lógicamente en contra del sacrificio de su hija, una madre preocupada y humana. También se esfuerza Eurípides por mostrar a un Menelao mezquino al que poco le importa la muerte de su sobrina si se lleva a cabo la campaña de Troya (recordemos que Menelao es el marido de Helena que, fugada con Paris a Troya, desencadena la guerra). De fondo, resuena la grandiosidad del héroe, de Aquileo (Aquiles.)

10.Las bacantes (Βάκχαι)

En Tebas, donde reina Penteo, se ha impuesto el culto a Dionisos. El rey está preocupado porque las mujeres (entre ellas Ágave, su propia madre) se han entregado al culto y al éxtasis orgiástico de las fiestas, y decide que ha de poner solución. Como no puede luchar contra el dios Dionisos, decide disfrazarse para espiar a las mujeres. Cuando estas se dan cuenta y lo descubren, comienzan a desgarrar sus miembros y literalmente lo descuartizan. La madre de Penteo, Ágave, participa del horrible crimen, pero no se da cuenta de que es su hijo, aunque él sí. Cuando Ágave es consciente se lamenta de lo sucedido, Dionisos aparece para arreglarlo todo, pero el final de esta tragedia no se ha conservado.
Ésta es una tragedia intrigante en la que Eurípides muestra la locura de una época de creencias misteriosas y esotéricas. Pero es más que eso, es la contraposición entre Penteo - la razón, el orden, la política - contra la histeria masiva que impone Dionisos - el caos -.

Otras obras de Eurípides:


Las fenicias (γοινίσσαι) : sobre la leyenda tebana que narra los inicios de las discordias entre Etéocles y Polinices (hijos de Edipo).

Los heraclidas (Ηρακλειδαι)

Las suplicantes ( Ικέτιδες)

Helena (Ελένη):
donde existen notas que hacen pensar en la comedia
-Hércules
-Andrómaca

6. CONCLUSIÓN
Los recursos teóricos que puedan consultarse tratan a Eurípides como un dramaturgo que rompe los esquemas trágicos convencionales para su época, lo que se aprecia en la lectura y análisis de Medea. Eurípides no se preocupa por la relación hombres-dioses, sino por la condición humana en sí misma. Sus personajes, por lo tanto se dejan llevar por sus pasiones; los celos y el odio anidados en la protagonista de la tragedia.











SÓFOCLES

Poeta trágico griego. Sófocles nació en Colono Hípico alrededor del año 496 a.C. Hijo de un rico armero llamado Sofilo, , Sófocles recibió la mejor educación aristocrática tradicional. A los dieciséis años fue elegido director del coro de muchachos para celebrar la victoria de Salamina. En el 468 a.C. a la edad de 28 años, se dio a conocer como autor trágico al vencer a Esquilo en el concurso teatral que se celebraba anualmente en Atenas durante las fiestas dionisíacas, cuyo dominador en los años precedentes había sido Esquilo. A partir de esa victoria, Sófocles ganó el primer premio en veinte ocasiones, y obtuvo en muchas otras el segundo. También derrota a Eurípides en uno de los concursos dramáticos que se celebraban anualmente en Atenas. Se convirtió en una figura importante en Atenas, y su larga vida coincidió con el momento de máximo esplendor de la ciudad.
Sus amigos mas destacados son Herodoto y Pericles, no mostró demasiado interés por la política, pese a lo cual fue elegido dos veces estratego para desempeñar una importante función militar y participó en la expedición ateniense contra Samos, acontecimiento que recoge Plutarco en sus Vidas paralelas. Su muerte coincidió con la guerra con Esparta.

 De las ciento veinte o ciento treinta obras que debió escribir y representar Sófocles en la Atenas de Pericles, sólo siete nos han llegado.
 Antígona, Edipo Rey, Áyax, La Tranquinias, Filoctetes, Edipo en Colona y Electra.
ANTÍGONA
Antígona era la hija de Epido y Yocasta y hermana de Ismene, de Eteocles y de Polinices. Antígona acompañó a su padre cuando éste, al descubrir el crimen y el incesto que había cometido, partió hacia el exilio después de arrancarse los ojos. Se refugiaron en Colona, un pueblecillo de Ática, donde la muerte trajo finalmente la paz a Edipo. Antígona regresó entonces a Tebas. Después de que Eteocles y Polinices se mataran mutuamente en su lucha fratricida por el poder, su tío Creonte, convertido en rey de Tebas, dijo que Eteocles tenía que recibir una sepultura y honras fúnebres (porque defendió el pueblo) y a Polinices no. A éste le cogieron y lo tiraron al campo para que las alimañas y las aves rapiñas se lo comieran.
Ismene se sometió al edicto de Creonte; no así Antígona , que transgredió conscientemente la prohibición por amor a su hermano. Condenada a ser emparedada viva, Antígona pone fin a su vida ahorcándose. Su prometido Hemón, hijo de Creonte, se da muerte sobre el cuerpo sin vida de Antígona, y la esposa de Creonte, a su vez se suicida de dolor.
EDIPO REY
Edipo rey de Tebas, hijo de Layo y Yocasta. Un oráculo advirtió a Layo que sería asesinado por su propio hijo. Decidido a rehuir su destino, abandonado a su hijo para que muriera en un montaña solitaria atando los pies de su hijo recién nacido. Su hijo fue recogido por un pastor y entregado al rey de Corinto, quien le dio el nombre de Edipo (pie hinchado) y lo adoptó como su propio hijo. El niño no sabía que era adoptado y, cuando un oráculo proclamó que mataría a su padre, abandonó Corinto. Durante su travesía, encontró y mató a Layo, creyendo que el rey y sus acompañantes eran una banda de ladrones y así, inesperadamente, se cumplió la profecía. Solo y sin hogar, Edipo llegó a Tebas, acosado por un monstruo espantoso, la Esfinge, que andaba por los caminos que iban a la ciudad, matando y devorando a todos los viajeros que no sabían responder al enigma que les planteaba. Cuando Edipo resolvió acertadamente el enigma, la esfinge se suicidó. Creyendo que el rey Layo había muerto en manos de asaltantes desconocidos, y agradecidos al viajero por librarlos del monstruo, los tebanos lo recompensaron haciéndolo su rey y dándole a la reina Yocasta por esposa. Durante muchos años la pareja vivió feliz, sin saber que ellos eran en realidad madre e hijo. Pronto Edipo descubrió que involuntariamente había matado a su padre. Atribulada por su vida incestuosa, Yocasta se suicidó y, cuando Edipo se dio cuenta de que ella se había matado, se quitó los ojos y abandonó el trono. Vivió en Tebas varios años pero acabó desterrado.
ÁYAX
En Troya, en el bando griego, una vez muerto Aquileo Aquiles, Ayax, gran guerrero e hijo de Telamón, se cree valedor de la herencia de las armas de Aquiles. Sin embargo las armas le son adjudicadas a Odiseo. Él jura matar a los líderes griegos. Antes de que pueda promulgar su venganza, es engañado por la diosa Atenea en la creencia de que el ganado ovino y vacuno que fueron tomadas por los aqueos, como despojos son los líderes griegos. Se sacrifica algunos de ellos, incluyendo un carnero que él cree que es su principal rival, Odiseo.
Ajax se da cuenta de lo que ha hecho. Y molesto porque Atenea le engañara y está segura de que los guerreros griegos se están riendo de él. Ajax contempla poner fin a su vida debido a su vergüenza pero antes aboga por no la dejara sin protección a su esposa, Tecmesa y a su hijo. Ajax a continuación da a su hijo, Eurysaces , su escudo. Ajax sale de la casa diciendo que va a purificarse y enterrar la espada que le dio Héctor.
Calcante advierte de que el Ajax no se debe permitir dejar su tienda de campaña hasta el final del día por el va morir. Teucro, hermano de áyax, envía un mensajero al campamento de Ajax con la palabra de la profecía de Calcas. Tecmesa y los soldados tratan de seguirle la pista, pero es demasiado tarde. Ajax había enterrado la espada de hecho, pero ha dejado la hoja que sobresale de la tierra y se había clavado en ella.
LAS TRANQUINIAS
Deyanira, hija de Eneo, rey de Calidón, reside en Traquis, en el palacio de Céix, junto con su hijo Hilo. Su esposo Heracles anda por Ecalia realizando sus famosos “trabajos”, teniendo abandonada a su esposa. Esta envía a su hijo Hilo a que averigüe qué hace su marido. Un enviado de Heracles llega a palacio trayendo un grupo de esclavas, conquistadas por su marido, entre las cuales se encuentra Yole, hija del rey Eurito, cuya ciudad ha arrasado su marido, y de la que está profundamente enamorado.
Deyanira decide reconquistar el amor de su esposo y, para ello, le envía un manto que tiene la virtud mágica de excitar el amor, y lo baña con un ungüento prodigioso, regalo del Centauro Neso. Pero el regalo de Neso era un embuste y el manto, al acercarse al cuerpo de Heracles, se inflama, se queda adherido a su cuerpo y le causa dolores de muerte.
Casi moribundo, furioso contra su mujer y con ansias de hacerla trizas, le traen en una camilla. Antes de llegar él, Deyanira se ha suicidado.. Heracles hace prometer a su hijo Hilo que desposará a Yole y le expone su deseo de ser llevado al monte Eta para su cremación.
FILOCTETES
En el camino a la final a la guerra de Troya, Filoctetes guerrero, portador del arco de Heracles, es mordido por una serpiente venenosa en el santuario de la diosa Chryse. La herida infectada se vuelve tan dolorosa que Filoctetes los gritos de agonía que repele a los jefes griegos, que Ulises dejar en la isla de Lemnos. Diez años más tarde ,Ulises vuelve a Lemnos con Neoptólemo, hijo de Aquiles ya muerto, para recuperar el arco de Filoctetes. Se ha profetizado que sólo con este arco Troya puede ser conquistado. Prometiéndole gloria y el honor, Odiseo convence a Neoptólemo a ganarse la confianza de Filoctetes y tomar el arco. Filoctetes, encantado de ver a cualquier ser humano y en especial a un griego, comparte su historia con Neoptólemo, le pide que le llevara de vuelta a Grecia, y lo entrega con el arco cuando se supera por un espasmo de dolor. Profundamente conmovido por el testimonio de primera mano la miseria Filoctetes, Neoptólemo confiesa la verdad a él, sino que trata de persuadir a Filoctetes que lo acompañara a Troya. Cuando Odiseo aparece, Neoptólemo devuelve el arco, declarando que sólo con Filoctetes se cumplira la profecía. Él pide perdón, e invita a Filoctetes que volver con él para ser sanado y luego a Troya para contribuir a la batalla. Lo único que termina la negativa de Filoctetes es la repentina aparición de Heracles, quien anuncia que Filoctetes y Neoptólemo deben unirse para tomar Troya.
EDIPO EN COLONO
Edipo, ya viejo y ciego, llega a la ciudad de Colono guiado por Antígona. En Colono el rey Teseo les recibe amigablemente y ofrece su ayuda a Edipo, cuando llega la noticia de la guerra entre los dos hermanos Etéocles y Polinices por la ciudad de Tebas. Ambos son hijos de Edipo. Un oráculo ha anunciado que conseguirá la victoria aquél hacia el cual se incline la razón de Edipo y es por esto que hasta Colono viaja Creonte, defensor de Etéocles, y Polinices. Edipo maldice a ambos hijos, que le habían desterrado de Tebas, y es protegido por Teseo. Poco después muere
ELECTRA
Electa hija de Agamenón, rey de Micenas o Argos, parte a la guerra a Troya, dejando a dos de sus hijos: Orestes y Electra con su madre Clitemnestra. Regresa victorioso después de matar a Príamo rey de los troyanos. A su vuelta a casa Egisto le da muerte secundado por Clitemnestra . Egisto trama la muerte de Orestes, y un viejo criado lo salva, enviándolo fuera. Electra permanece con su madre. Siendo ya una joven casadera, Egisto ahuyenta sus pretendientes por temor a que engendre un hijo que quiera vengar la muerte de Agamenón. Electra, en peligro de morir en manos de Egisto es rescatada por Clitemnestra, pues teme que por esta acción sus vasallos la odien. Al fracasar con este intento de muerte, Egisto la casa con un campesino pobre. Su vida es triste y llena de miserias y lamentos. No olvida a su padre muerto. El odio hacia su madre por haber dado muerte a su padre crece. Pasan los años y un día regresa a Orestes acompañado de Pílades su amigo. Escucha las quejas de Electra y su deseo de dar muerte a su madre, pues no puede olvidar la infamia de su crimen. Llega el anciano criado que retiró al hijo de la casa de su madre y le dice que debe matar a Egisto y a Clitemnestra. Orestes guiado por el anciano va al encuentro de Egisto y lo mata. Los dos hermanos confabulan para matar a la madre. Orestes un poco reticente al principio, accede después. La mandan llamar diciendo que Electra tiene un hijo que acaba de nacer. Llega Clitemnestra y Orestes le clava un puñal en el pecho ayudado por Electra. Electra se desposa con Pílades. Los dos hermanos lloran su tragedia y se separan sintiéndose víctimas del Destino y de los dioses.







ESQUILO






a. La vida de Esquilo. Relaciones de Esquilo con el público ateniense. Esquilo y Sicilia. Premios
Esquilo nació en Eleusis en 525/24 a.C. Era hijo de un distinguido hacendado llamado Euforión. Intervino en las batallas de Maratón y Salamina, contra los persas, así como en otras de las guerras médicas. Fue absuelto en un proceso e impiedad por violar el secreto de los misterios. Siendo muy joven participó en los concursos de los poetas trágicos, quizá en 28, de los cuales en trece fue el vencedor.
En su madurez se trasladó a Sicilia a la corte de Hierón, tirano de la ciudad, seguramente llevado por la abundancia de artistas que en dicho lugar se daban cita. Allí, tal vez representara por segunda vez Los Persas, obra que le valió el triunfo en Atenas.
Poco después regresó a Atenas, pues en 468a.C.dejó el primer puesto en el agón a Sófocles. No se sabe por qué regresó nuevamente a Sicilia, aunque cierto pasaje de Aristófanes en Las Ranas nos da un indicio: alude a la decepción que experimentó con el público ateniense, de lo cual se deduce que la relación entre éste y el autor no siempre fue buena, quizá debido a la no obtención de premios en ocasiones. Murió en Gela en 456/55a.C. y su tumba se convirtió en santuario visitado por todos los trágicos del momento. Los atenienses honraron su memoria con una ley propia que permitía a cualquiera participar en el agón (certamen) con obras de Esquilo. Pero fue Aristófanes, en Las Ranas, quién mejor honró la memoria de este autor trágico trazando una imagen sublime del mismo.
• Los persas (472 a.C):
La acción de Los Persas tiene lugar en Susa, capital del Imperio Persa. Allí, la reina Atosa, viuda del rey Darío se preocupa por la suerte que puedan correr su hijo Jerjes y sus tropas, ya que se encuentran en línea de batalla y Atosa ha tenido un sueño que presagiaba desgracias. Un mensajero trae funestas noticias para Persia: los griegos han vencido en Salamina. Aparece entonces la sombra del rey Darío, esposo de Atosa que predice nuevas desgracias para el pueblo persa. Más tarde aparece Jerjes, el derrotado en Salamina, lamentando su derrota.
Los siete contra Tebas(467 a.C):
El ejército de Argos ( en el que milita Polinices, hijo de Edipo e Yocasta) cerca la ciudad de Tebas, gobernada injustamente por el hermano de Polinices: Etéocles. Un mensajero informa al gobernante de Tebas que la ciudad es asediada por siete capitanes cada uno de los cuales está situada en una de las siete puertas de la ciudad. Etéocles dispone otros 7 capitanes de Tebas para salvaguardar la ciudad. Los dos hermanos, militantes de bandos contrarios, se enfrentarán en la séptima puerta dándose muerte mutuamente.



Los magistrados de Tebas decidirán no dar honras fúnebres al cadáver de Polinices por haber luchando contra su patria y dejar su cadáver a la intemperie para que sea devorado por las aves. Pero Antígona, también hija de Edipo y Yocasta, hermana de Polinices y Etéocles, se pronunciará contra esta decisión de los magistrados.
Etéocles se alza como el defensor de la patria. Cuando se dirige a luchar contra su hermano, Etéocles es consciente de la desgracia que se le avecina, pero acepta su sino ya que nada se puede hacer contra el designio divino. Polinices, por el contrario, se alza como el traidor, a pesar de lo cual su hermana, Antígona, pretenderá enterrar a su hermano dignamente.
Las suplicantes( 463 a.C):
Huyendo de los hijos de Egipto, rey de Egipto, las suplicantes o danaides (hijas de Dánao), llegan a Argos en busca de la protección de la ciudad. Llegan acompañadas de su padre, Dánao, y ruegan y suplican a los dioses que hundan las naves de los hijos de Egipto que andan persiguiéndolas: prefieren la muerte al matrimonio. El rey de Argos decide concederles la protección solicitada, cuando desembarcan los perseguidores de las danaides. El rey de Argos mantiene su protección a pesar de la llegada de los hijos de Egipto, y las suplicantes entonan un himno de gratitud.
• La Orestíada,(458 a.C.)
Es la única de las trilogías de Esquilo que ha llegado completa a la actualidad, comprende tres obras:
• Agamenón
• Las coéforos
• Las euménides
• Agamenón:Un vigía, y más tarde un mensajero, anuncia que Agamenón, jefe de las fuerzas griegas, vuelve a Argos, su patria, después de haber vencido en la guerra de Troya. Clitemnestra, su esposa, aguarda no muy felizmente la llegada del marido, ya que jamás le perdonó que sacrificara a su hija Ifigenia, y durante la ausencia de Agamenón ha mantenido relaciones con el rey Egisto. Cuando Agamenón llega a Argos, trae consigo a Cassandra, profetisa joven y doncella, hija de Príamo, el rey de la vencida Troya, condenada a ser su esclava. Clitemnestra, sumida en el odio por su marido y los celos por Cassandra, acaba asesinando a ambos y reinando con Egisto en Argos.
• Las coéforos Seis años después de lo acaecido en la tragedia "Agamenón", Orestes vuelve a Argos (marchó de allí tras el asesinato de su padre a manos de su madre Clitemnestra) para tomar venganza, un mandato del dios Apolo le obliga a ello. Electra y Orestes, ambos hermanos, se reconocen y deciden tramar un plan para el asesinato de la madre y vengar así al padre Agamenón. Orestes se introduce en el palacio fingiendo ser un profeta que viene a anunciar su propia muerte a Electra. Una vez en el palacio mata a Egisto y a su madre. Un coro de mujeres ofrece honras fúnebres al sepulcro de Agamenón, son las coéforos.
• Las euménide Las erinias, castigadoras de los criminales, persiguen a Orestes que se ha refugiado en el templo de Apolo en Delfos. El dios ha aconsejado a Orestes que marche a Atenas, donde será juzgado justamente. Al llegar a Atenas, la diosa Atenea le dice que ha de ser juzgado por jueces atenienses, y así ocurre. Los jueces determinan que tan horrorosos son los crímenes de Orestes como los que cometiera su madre, Clitemnestra, por lo que Orestes es absuelto. Atenea, una vez celebrado el juicio, aplaca la furia de las erinias que se convierten en seres buenos llamados euménides.
• Prometeo encadenado ( autoria en discusión): Tras haber arrebatado el fuego a los dioses y haberlo entregado a los hombres, Prometeo es encadenado, por mandato de Zeus, en un peñasco abandonado, cercano al mar. Prometeo lamenta su suerte cuando aparecen las ninfas oceánides y el propio Océano para aconsejarle que acate el castido de Zeus. Más tarde aparece Ío, hija de Ínaco y Prometeo le desvela un secreto: nacerá un día Heracles (Hércules), familiar lejano de Ío y héroe destinado a salvar a Prometeo de su condena. Zeus quiere enterarse de este secreto y para ello enviará Hermes, sin embargo Prometeo jamás revelará el secreto al dios alado. Zeus entonces envía su furia y el peñasco donde estaba Prometeo se resquebraja, dejando caer Prometeo en el vacío.








Trabajo realizado por Magdalena Robu, Montse Montalvo y Elena Ariza.

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